Transformaciones en Los Chapitos durante el 2023: Una Saga de Cambios y Desafíos

El año 2023 marcó una serie de transformaciones para la facción de Los Chapitos, perteneciente al Cártel de Sinaloa, en medio de las acciones desplegadas por las autoridades mexicanas y estadounidenses. Enfrentándose a la presión gubernamental y convertidos en objetivo prioritario de Estados Unidos debido a la creciente epidemia de fentanilo, esta facción del cartel experimentó cambios significativos.

Todo comenzó el 5 de enero, cuando fuerzas de la Guardia Nacional y la Secretaría de la Defensa Nacional llevaron a cabo un operativo sangriento que resultó en la captura de Ovidio Guzmán López, conocido como El Ratón, hasta entonces líder de la facción del Cártel del Pacífico.

Esta no fue la primera vez que Ovidio fue detenido; ya en octubre de 2019, había sido arrestado en Culiacán pero liberado horas después, en medio de la amenaza del Cártel de Sinaloa de ejercer violencia contra la población civil. En este operativo de 2023, 29 personas perdieron la vida, incluyendo 10 militares y 19 presuntos miembros de Los Chapitos.

Cuatro meses después de este suceso, el gobierno estadounidense anunció nuevos cargos contra Los Chapitos, considerando al Cártel de Sinaloa como una de las organizaciones más grandes y poderosas del mundo. La epidemia de fentanilo ilícito destinado a los mercados estadounidenses desencadenó una serie de medidas, incluyendo sanciones a proveedores de precursores químicos.

Las autoridades estadounidenses señalaron a Los Chapitos, liderados por los hermanos Iván Archivaldo y Jesús Alfredo Guzmán Salazar, junto con sus hermanastros Ovidio y Joaquín Guzmán López, como responsables del tráfico de toneladas de fentanilo, heroína y metanfetamina hacia Estados Unidos. Esto resultó en imputaciones federales en distintos tribunales.

Sintiendo la presión, Los Chapitos emitieron una carta pública a través del noticiero de Azucena Uresti en mayo, desligándose de ser la cabeza del Cártel de Sinaloa y negando su participación en el tráfico de fentanilo.

El 15 de septiembre, Ovidio Guzmán López fue extraditado a Estados Unidos desde la cárcel de máxima seguridad del Altiplano, marcando un hito en la cooperación policial entre ambos países. Las autoridades estadounidenses agradecieron a México por la colaboración en la lucha contra el narcotráfico y otros desafíos vitales.

Desde la detención de El Ratón, las autoridades estadounidenses señalaron a Iván Archivaldo como líder de Los Chapitos, emitiendo fichas de recompensa de hasta 10 millones de dólares por su captura. Jesús Alfredo también fue objeto de estas recompensas.

A finales de octubre, narcomantas aparecieron en diversos municipios de Sinaloa, adjudicadas a los hijos de Joaquín El Chapo Guzmán, prohibiendo la producción y tráfico de fentanilo. Los Chapitos y sus brazos armados, incluso el Cártel de Tijuana, se sumaron a esta supuesta prohibición.

En octubre, se realizaron cateos en propiedades relacionadas con Néstor Isidro Pérez Salas, alias El Nini, jefe de seguridad de Los Chapitos. Este personaje, también buscado por la DEA de Estados Unidos, fue detenido a finales de noviembre, siendo acusado de trabajar directamente para el principal adjunto de Iván Archivaldo.

En un giro sorprendente, la periodista Anabel Hernández reveló que Iván Archivaldo acordó en una junta entregar o asesinar a El Nini, considerándolo un obstáculo para la organización. Su cargo fue ocupado por El Panu.

Así, el 2023 se convirtió en un año crucial para Los Chapitos, enfrentando desafíos, detenciones y reconfiguraciones internas mientras continuaban siendo un foco de atención para las autoridades tanto en México como en Estados Unidos.