Zeferino Peña Cuéllar: La Sombra Maestra detrás de Los Zetas

 En el intrincado mundo del crimen organizado mexicano, la figura de Zeferino Peña Cuéllar, conocido como "Don Zefe", emerge como el orquestador en las sombras de una de las organizaciones más letales, Los Zetas. Este oscuro personaje, durante mucho tiempo en un segundo plano, desempeñó un papel crucial en la gestación de este grupo de élite delictivo.

Antes de que Arturo Guzmán Decena, alias "El Z-1", recibiera la orden de formar Los Zetas como la "guardia personal" de Osiel Cárdenas Guillén, líder del Cártel del Golfo, Zeferino Peña Cuéllar ya había iniciado este proyecto. Su influencia, sin embargo, contrasta con el perfil bajo que mantuvo en comparación con otros líderes del cártel.

"Don Zefe" entró en escena después de la detención de Juan García Ábrego en 1996, vinculado con la formación del grupo criminal "Los Texas". Junto con el ex policía federal Guillermo González Calderoni, crearon un frente amplio para controlar la frontera de Tamaulipas, Nuevo León y Coahuila. Sin embargo, con la ascensión de Osiel Cárdenas al liderazgo del Cártel del Golfo, se rompió con el pasado de García Ábrego, y Zeferino Peña Cuéllar se convirtió en un actor clave en la nueva era del cartel.

Se atribuye a Zeferino Peña Cuéllar la formación del primer núcleo de ex militares que más tarde se convertirían en Los Zetas, según el libro "El Cártel de Sinaloa" del periodista Diego Enrique Osorno. Aunque Los Zetas nacieron en 1998-1999 como una unidad para aniquilar a los rivales del Cártel del Golfo, su presencia inicial en Matamoros se vio afectada por la intensa vigilancia militar. Bajo la tutela de "Don Zefe", se trasladaron a Miguel Alemán, respaldados por el alcalde y el jefe de la policía municipal.

Las fotografías de "Don Zefe" apadrinando a niños en eventos sociales a principios del nuevo milenio capturan la dualidad de su vida pública y privada. Su presencia en la nómina de Tamaulipas de 1999 a 2001 como jefe de la policía municipal de Miguel Alemán lo conecta con la política local y los círculos de poder.

Los documentos federales revelan que "El Z-1" ingresó a las Fuerzas Armadas en 1992 y desertó en 1997, siendo reclutado por el Cártel del Golfo bajo las órdenes de Gilberto García Mena y Zeferino Peña Cuéllar. A pesar de los intentos de asesinato en su contra en 2001, "Don Zefe" permaneció en la cima del Cártel del Golfo hasta la guerra con Los Zetas, el grupo que ayudó a crear. Su evasión del país marcó el inicio de su desaparición de la escena criminal.

Zeferino Peña Cuéllar personifica la complejidad de las alianzas y rivalidades en el mundo del narcotráfico mexicano, dejando un rastro de intrigas y disputas que aún resuena en la historia del crimen organizado en el país.